Estamos en los tiempos de magostos, los bosques húmedos nos invitan a la recolección de setas o las variadas y coloridas calabazas que lucen en los huertos familiares. Todos ellos son frutos suculentos que nos regala el otoño ventoso.
Aprovechamos para compartir una receta, que a pesar de ser muy conocida y recurrente, es propia de la festividad de Todos los Santos: las chulas de calabaza.
Pelar y cortar medio kilo de calabaza (de la situada a la derecha en la foto principal), cocerla diez minutos en agua ligeramente salada, escurrir bien y dejar enfriar.
Pasar por el pasapurés.
Aparte mezclar un huevo batido con dos cucharadas de azúcar, la ralladura de un limón y tres o cuatro cucharadas de harina, mezclando finalmente con el puré de calabaza.
Para concluir se fríen tomando como medida cucharas de postre y a disfrutar.
Hasta pronto.
1 comentario:
Anoto, anoto, porque ni idea y tienen una pinta..... saludos y feliz otoño.
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