La convinación de baño en agua termal y posterior enfriamiento en el río nos dejó como relojes suizos. Sin tiempo que perder y antes que la temperatura suba de los 30º nos encaminamos hacia la primera ruta del día, Corga da Fecha, que iniciamos en el puente de Río Caldo, junto a la villa termal de Lobios.
No me extiendo en comentar las características de esta ruta porque está ampliamente documentada en Internet. Solamente significar que discurre la primera parte por el margen izquierdo del río en sentido ascendente.
En ese tramo contemplamos con cierta consternación como las papeleras se encuentran desbordadas y prolifera la basura por todas partes. Es agosto y durante el día coinciden en torno a este bello paraje cientos de personas que en muchos casos carecen del más mínimo respeto, educación o civismo como para llevarse consigo los residuos que generan.
También se evidencia la falta de vigilancia por parte de quien corresponda, vemos numerosísimas tiendas instaladas en la ribera del rio, que han pernoctado en acampada libre, sin que ninguna autoridad se lo haya impedido a pesar de estar prohibido.
La principal fuente de ingresos de la zona procede del turismo y bueno sería que el Concello de Lobios mejorase la limpieza y la vigilancia para que todo el mundo pueda disfrutar responsablemente de esta zona privilegiada.
Por lo demás el trayecto es muy interesante tanto desde el punto de vista paisajístico como histórico. En el recorrido pasamos al lado del "Aquis Originis", primera de las mansiones de origen romano existentes en la provincia de Orense y llegamos al pie de la cascada de Corga da Fecha, que en esta época del año tiene un caudal reducido, pero es expléndida.
1 comentario:
Con el calor que está haciendo leerte me refresca.
Saludos
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