29/9/10

TERMAS DE PREXIGUEIRO

Como el primer domingo de otoño el sol lucía expléndido, nuestros guías espirituales nos sugirieron acertadamente llevarnos a conocer las Termas de Prexigueiro, que ellos ya habían visitado.
Al llegar a Prexigueiro, está señalizado el acceso a las termas, situadas en medio de un frondoso pinar sobre el Río Cerves

Constan de un circuito termal al aire libre con cinco termas de agua caliente y temperatura que oscila entre los 37 y los 41 grados.
Otras dos termas son de agua fría, muy propicias para los amantes de las fantasías o de las emociones fuertes.
El personal de las termas brinda a los clientes un trato exquisito y proporciona toda la información necesaria para los usuarios de este tipo de instalaciones.



Salimos satisfechos después de disfrutar del baño relajante. Después de tomar una cervecita reconstituyente nos acercamos al cauce del río Cerves, donde aún perviven las instalaciones de las termas primitivas.



Desde Prexigueiro nos acercamos a Ribadavia, situada a tan solo tres km y conocida por su patrimonio histórico-monumental, pero también es un referente internacional de las villas y ciudades vinculadas a la producción y elaboración de vinos excepcionales.
Paseamos por la plaza fortificada, rodeada de soportales y por el magnífico barrio judío.


La gastronomía en estas tierras es variada y generosa. Optamos en esta ocasión por un menú gallego por excelencia: Pulpo a feira y carne o caldeiro, regados expléndidamente ambos con Ribeiro tinto. Todo ello por un más que razonable precio de 12,5 € por comensal, café incluido.
Maravillosa comida en magnífica compañía.
El regreso decidimos hacerlo tomanto en Crecente el desvío por el puente internacional para visitar la medieval villa de Melgaço situado en el margen izquierdo del río Miño ya en tierras portuguesas.
Melgaço está edificada en torno a la torre fortificada medieval y situada sobre una colina que brinda magníficas vistas sobre los viñedos dedicados a la producción de los excelsos albariños blancos.


Cuando descendemos de la torre visitamos el interesante Museo do Cinema y paseamos por las coquetas callejuelas adoquinadas antes de emprender el regreso a casa.













4 comentarios:

BRUJILDA: dijo...

Sin duda un relajante y agradable día... Gracias por el descubrimiento. He estado en un par de ocasiones en As Chavasqueiras y en las de Outariz pero, estas no las conocía.
Un saludo

CARLOS dijo...

Ese plato de pulpo, uffffffffff, tiene una pinta exquisita, habrá que perderse un día por esa tierra para degustarlo nuevamente. Precioso post. Saludos.

yamajos dijo...

Merece la pena acercarse a visitarlas y disfrutarlas Brujilda. Están rodeadas de naturaleza y silencio. Además es un magnífico punto de partida para conocer en los alrededores paisajes y pueblos muy interesantes: Arnoia, Leiro, San Clodio...
Un saludo y buena planificación para vuestro inminente viaje

M.Eugenia dijo...

Que buenos recuerdos me traae esta ruta.
Un abrazo